¿Por qué estoy desnutrido?
Algunas personas corren más riesgo de desnutrición que otras: por ejemplo, las personas de edad avanzada, las personas que vuelven de una larga estancia hospitalaria, etc. Pero también las personas que sufren problemas dentales, dolor al comer o digerir alimentos, estreñimiento, depresión, duelo, dependencia, medicación múltiple, etc.
¿Influye mi edad en mi propensión a la desnutrición?
La edad es un factor de riesgo de desnutrición.
A medida que envejecemos, nuestro metabolismo cambia, lo que puede debilitar nuestro estado nutricional y aumentar el riesgo de perder fuerza y músculo. Es un hecho que puede afectar a cualquier persona, con mayor frecuencia a partir de los 70 años.
Ciertos comportamientos asociados al avance de la edad, a menudo involuntarios, pueden sumarse a este cambio metabólico y aumentar el riesgo de desnutrición. Por ejemplo, la actividad física y el apetito pueden disminuir con la edad, y pueden aparecer dificultades para comer: problemas para tragar, masticar, etc.
Es normal ser más propenso a la desnutrición cuando se es mayor. Por eso es importante que acudas al médico con regularidad y que le digas si sientes que estás perdiendo el apetito o si tienes dificultades o dolor al comer. Así podrán detectar cualquier posible desnutrición y tratarla lo antes posible.
Como cuidador o familiar de una persona mayor, también puedes dar la voz de alarma si notas que tu ser querido pierde peso rápidamente o le cuesta más comer.
La desnutrición no es inevitable y, afortunadamente, hay soluciones.
¿Podrían los cambios en mi peso o apetito ser signos de desnutrición?
La pérdida involuntaria de peso o un cambio en el apetito pueden ser signos potenciales de desnutrición.
Hay una serie de señales de advertencia:
- Por ejemplo, notas que la ropa te queda grande, que tienes que apretarte más el cinturón o que tu peso disminuye con cada sesión de pesaje.
- Te sientes más cansado, no puedes levantarte de la cama, te cuesta andar o subir escaleras.
- Terminar las comidas se vuelve difícil, comes menos que antes, o tienes menos ganas de comer.
¿Los acontecimientos vitales recientes pueden influir en mi alimentación y en mi salud en general?
La hospitalización, la enfermedad o la cirugía, por ejemplo, pueden alterar el organismo y los hábitos alimentarios.
De hecho, entre el 20 y el 40% de los pacientes hospitalizados sufren desnutrición1.
La hospitalización puede provocar desnutrición, debido al estrés causado por la hospitalización, la enfermedad o la cirugía. Además, la cirugía es una agresión al organismo, que provocará hipercatabolismo (aumento de las necesidades del organismo). También se modifican los hábitos alimentarios, lo que puede provocar una pérdida de apetito y/o una reducción de la ingesta de alimentos.
Todos estos factores pueden provocar o intensificar la desnutrición.
¿Pueden ciertos factores emocionales o psicológicos contribuir a mi desnutrición?
Ciertos factores emocionales o psicológicos pueden contribuir a la desnutrición.
Durante un choque emocional, un bajón, una depresión, la soledad o el estrés, podemos sentir menos hambre, olvidarnos de comer o comer de forma más irregular. Nuestro cuerpo también puede reaccionar ante estas situaciones y absorber peor los nutrientes, por ejemplo. Lo que ocurre en nuestra cabeza suele repercutir en nuestro cuerpo.
Puedes hablar de tu estado psicológico y emocional cuando visites a tu médico, para que pueda controlar las posibles consecuencias sobre tu apetito y tu peso.
Si notas que estás perdiendo mucho peso y ya no puedes comer, pide cita con tu médico: él podrá diagnosticar una posible desnutrición y ayudarte a encontrar una solución.
¿Podrían algunos de los medicamentos que estoy tomando estar contribuyendo a mi desnutrición?
Los efectos de ciertos medicamentos pueden contribuir a la desnutrición.
Algunos medicamentos :
- Provocan pérdida de apetito
- Reducen la absorción de nutrientes
- Provocan vómitos y trastornos alimentarios
No te asustes, no todos los medicamentos provocan estos efectos. Habla con tu médico, que podrá ayudarte lo mejor que sepa sobre los medicamentos que tomas durante la semana.